Pues así es…he vuelto.
Tras la superpájara del ironman de Vitoria y el sufrimiento brutal de aquella maratón ¡he vuelto al disfrutar del triatlón !
Factores de horarios laborales me impidieron empezar el año entrenando como quería pero al fin va tomando forma la idea de que afrontar este año el ironman de holanda no va a ser tanta locura… o si 😉
El día empezó perfecto, despertarme temprano, desayuno a tope, paso por el baño y con todo preparado me recoge Iago en casa y nos vamos para Portugal .
Una vez allí nos juntamos y preparamos con Luis y Rodri y ya en la zona de boxes con David y clavelitos. Ya estamos todos, último aviso para el barco, los que no se suban no van a la salida.
En el barco nos juntamos con Xose y Cuña. Entre risas nervios hacemos los últimos retoques al neopreno y casi sin darnos cuenta están saltando los de la prueba distancia olímpica del barco hacia la salida.
Salen, allá vamos nosotros .
En esta prueba se da la singularidad de que el barco, una vez llega a los casi 2 km de Caminha echa el ancla al lado de dos boyas y suena la bocina, a partir de ahí, todos al agua.
Salto del barco al agua, está fría, la gente nada como loca hacia adelante y sin darme cuenta salgo despedido nadando a lo que daba, para intentar no perder la estela. Vamos muy rapido, la corriente ayuda. Salgo del agua en 25 minutos ¡25! ¡Gracias corrientes del Miño!
Transición rápida, unas palabras con David que llegaba cuando yo salía y a pedalear.
Tiene esta carrera fama de sector duro de bici así que empiezo con calma . Rápido la carretera se pone cuesta arriba, muy cuesta arriba. Esto va a ser complicado, el sol empieza a hacerse notar y el viento sopla fuerte en la cara, la carretera esta en malas condiciones , que bien lo estoy pasando .
Tras 25 km subiendo y recorriendo la cima de la sierra comienza una bajada que se me antojo rápida divertida y peligrosa.
Ya en una zona más arbolada que cubría un poco el sol, adelanto a un montón de gente del triatlon distancia olímpica, empiezo la segunda vuelta con la moral por las nubes .
Las rampas siguen siendo infernales, calor y viento, mucho viento en contra. En la bajada, en una zona donde alcance 83 km/h, al salir de una curva a izquierdas veo salir de los arbustos a un chico con la bici partida en dos y ensangrentado de pies a cabeza.
Paro y pregunto, «¿Estás bien ?», Me contesta, «la máquina esta rota, la máquina está rota».
Tras hablar un poco con el y avisar a un policía del accidente continuo mi marcha hacia la última transición. Intentando hidratarme para afrontar 21 kms por caminos al lado de las playas .
Llego a la t2 dejo la bici y al salir Iago me grita y me dice, «¡hice segundo en el olímpico!». Me paro, le abrazo y continúo.
La carrera son 10.5 km hacia abajo y 10.5 km hacia arriba.
En resumen el sector de carrera fue ir saludando a los amigos que me cruzaba, sufrir dolor y calambres los primeros 10 y corriendo mucho mejor los últimos 10 y eso que el viento era en contra .
Resumo esta parte porque no me quiero alargar y si deseo hacer un inciso .
ES LA CARRERA MÁS BONITA Y MÁS DURA QUE HE CORRIDO
Ya van unos cuantos medios IM si no me falla la memoria 12 , 3 IM y un sin fin de carreras , cada una con su dificultad su reto y su motivación, pero tanto en belleza del recorrido como su dureza la hacen especial, si le sumamos el viento y el calor asfixiantes la convierte en una carrera que recordaré siempre y a la que espero volver .
Ahora a apretar lo que queda para llegar al IM de Holanda en condiciones de acabar.
¡Nos vemos en los bares!
Más allá de un reto 